viernes, 15 de mayo de 2009

Sinfonía de oros (14 de mayo de 2008)

¡Espectacular la cata que nos preparó Locho! Eran cinco vinos blancos no españoles, sin más información. Una cata para disfrutar de la cata, más que para adivinar variedades o tipos de vino. ¡Y vaya si disfrutamos! Por la forma de las botellas apuntaban hacia Alsacia o el Rhin.
Cuando se empezaron a servir los vinos se desató la sinfonía de oros en las copas. Diversas gamas de oros, luminosos, lágrimas densas,...¿a qué vinos nos estabamos enfrentando?. Ya sin tocar las copas nos dimos cuenta que estábamos ante otra dimensión de vinos, muy distinta a los que estamos habituados. Esto confirmaba nuestra sospecha de vinos alsacianos o alemanes, posiblemente biodinámicos.

La verdad es que viendo las cinco copas daba un poco miedo empezar a trabajar con ellas. ¿Serían capaces de superar las expectativas que habían despertado o más bien defraudarían? En cuanto empezamos a meter las narices se despejó la incognita: estábamos ante cinco grandes vinos. Aromas no explosivos pero limpios y complejos. El primer vino más mineral, el segundo a moscatel, el tercero a orejones, el cuarto más cítrico y el quinto..., el quinto era otra cosa. Por el color de oro viejo (pero muy viejo, casi de anticuario) desvelaba que tendría que ser bastante viejo. Y sus aromas eran muy complejos, muy cambiantes a medida que avanzaba la cata, con notas dominantes a albaricoque.
Y sus bocas... intensas, dulces en su mayoría. Vinos para disfrutar cada trago. Estábamos de acuerdo en que no eran vinos para acompañar una comida sino más bien para disfrutarlos relajadamente con algo de foie, quesos y buena compañía.
El primer vino era el más seco, con una boca mineral, quizás el más difícil de los cinco. El segundo era una golosina, intenso en boca con recuerdos a miel. El tercero tenía una boca carnosa, untuosa. Un vino delicioso que a Jose le recordaba a uno que se había catado hace poco (en una cata sin crónica) y que al final resultó ser el mismo vino pero de otra añada.El cuarto no le andaba a la zaga al tercero con una boca grasa y un perfecto equilibrio entre el dulzor y un toque amargoso. El quinto volvía a sorprender en boca. No era tan untuoso como los dos anteriores pero era muy personal, complejo, misterioso. A mí me sedujo completamente.
¿Ante qué vinos estábamos? Locho desveló el secreto: eran cinco vinos alsacianos de Domaine Marcel Deiss, uno de las mejores bodegas de Alsacia y desde luego de las más personales.

En sus 220 parcelas (27 has.) cultiva de forma biodinámica multiples variedades, algunas de ellas en coplantación (variedades mezcladas en el mismo viñedo). Elabora tres categorías de vinos (www.marceldeiss.com):
- Vinos de frutas: donde domina la variedad que se complementa por la añada.
- Vinos del tiempo: la añada expresa todo su potencial de concentración a través de la podredumbre noble (vendimía tardía).
- Vinos de terroir: en estos vinos es el terruño el que imprime todo el carácter y personalidad a los mismos, hasta el punto de que no indica las variedades con las que está elaborado el vino (desde 2005 es facultativo poner la indicación de añadas en Alsace AOC).
El vino que ganó (el tercero) era un vino de terroir: Altenberg de Bergheim Gran Cru 2004. El segundo era un vino de fruta: Riesling Gran Cru 2002 (vino cuarto). El vino que quedó tercero (el tan especial vino quinto) era otro vino de terroir: Gruenspiel 2000. Los dos ultimos vinos eran vinos de fruta: Pinot Blanc 2006 Bergheim y Gewurztraminer 2006 St. Hippolyte.
¡Vaya vinazos que os perdisteis Paula, Angeles, Carlos...! A ver si apareceis, que os echamos en falta. Tres de los vinos han pasado a encabezar nuestro top 5 de 2009 y por primera vez la puntuación de los blancos supera a la puntuación de los tintos. El reto para lo que queda de 2009 va a ser encontrar vinos que puedan competir con los de Marcel Deiss. ¡Difícil tarea!
Para acabar la noche nos zampamos una caldeirada de pulpo que no tenía nada que envidiar a la de la Isla de Ons, acompañada por las empanadillas tan ricas de Ribeira de Fefiñans y por los primeros pimientos de padrón de la temporada.
Y despedimos a nuetros ironmanes que en breve parten para Lanzarote. Cuando lo esteis pasando chungo acordaros de los ricos vinos de Marcel Deiss. ¡Hasta la vuelta!

Notas de cata (puntuación de 0 a 20 puntos)
Altenberg de Bergheim Gran Cru 2004 - 18,77 puntos

Vino luminoso, amarillo dorado y brillante. Un color atractivo. Nariz muy intensa, fruta dulce, membrillo, melocotón, albaricoque, uvas pasas, miel y oreones. Es muy elegante en nariz y en boca es impresionante, una "explosión de potencia", carnoso, sabroso y untuoso. Un vino delicioso, para disfrutar y que no deja indiferente. La expresión de un productor en un terroir.
Riesling Gran Cru 2002 - 18,22 puntos
Amarillo dorado, brillante y muy luminoso. Nariz intensa, con notas a cítricos, en especial pomelo, también recuerda a las ciruelas, notas ahumadas. En boca carnoso, graso, cálido, con taninos dulces. Perfecto equilibrio entre el toque dulce y el amargoso. Con carácter.
Gruenspiel 2000 - 18,00 puntos
Oro viejo, transparente, brillante, luminoso. Nariz intensa con mucho carácter afrutado. Pasas, ciruelas, floral, rosa, albaricoque. En boca cálido y alcohólico. sabroso, frutal y floral, albaricoque. redondo, equilibrado, con carácter.
Gewurztraminer 2006 St. Hippolyte - 17,50 puntos
Brillante, amarillo dorado, vivo. Nariz muy intensa, pétalos de rosa, complejo, con un fondo de barniz. Muy elegante, mineral. En boca cálido, intenso, notas de miel. Vino varietal con carácter.
Pinot Blanc 2006 Bergheim - 15,70 puntos
Amarillo pajizo, brillante con reflejos dorados. Nariz limpia, muy mineral. Profundo. Pequeños apuntes balsámicos. Cítrico. En boca untuoso, cítricos muy maduros, minerales, chicle de fresa.

viernes, 8 de mayo de 2009

Fabes con Vega Sicilia (7 de mayo de 2009)

¡Paula, Paula! ¡Que ojo tienes para perderte las mejores catas! Fran, se te va a poner más dolor de cabeza cuando te enteres de las fabes que te perdiste. En cambio otros como Tonino parece que las huelen. ¡Así es la vida!
¡Gracias a nuestros amigos Iñigo y Teresa!, que nos prepararon una cata divertida y unas fabes de esas que hacen historia con un tiramisú para acabar (de chuparse los dedos). Pero de esto hablaremos más tarde. Ahora vamos con la cata.

Eran cinco tintos. Según Iñigo tres Riberas de Duero y dos Riojas. Tres eran reserva o gran reserva y dos crianzas del 2005. Y para que no hubiera suspicacias nos confirmó que estaba un Vega Sicilia Único. ¿Cúales serían los otros vinos? ¿Nos estaba preparando alguna trampa?
Al dar el primer repaso a los cinco vinos nos dimos cuenta del gran nivel de los mismos. El primero presentaba una nariz muy golosa y compleja. A Tonino le gustó mucho, ya veremos la nota de cata que hizo (a él le toco ese vino). A mí me recordaba a los vinos de Maladinha ( y resultó que Iñigo nos engañó un poco y el vino era de la misma zona: Alentejo portugués). Era un Marqués de Borba Reserva 2000.
El segundo vino fué el que destacó menos. Estaba muy bien pero no enamoraba. Para muchos era un Rioja clásico y efectivamnete se trataba de Remelluri Reserva 2002.

Los vinos 3, 4 y 5 fueron los que gustaron más. El vino 3 presentaba una nariz elegante y una boca... con la que no nos pusimos de acuerdo los catadores. Para algunos estaba redondo y para otros no tanto, con cierta astringencia disonante. Con el vino 4 todos estabamos de acuerdo en que era el más goloso, con bastante dulzura.
El vino 5 al principio estaba más cerrado pero a medida que se iba abriendo desplegaba todo su esplendor con aromas a fruta madura, especias,...y una boca potente y cremosa. ¿Sería el Vega Sicilia Único? La mayoría creíamos que no. Parecía un vino más joven. ¿Dónde estaba entonces el vega Sicilia? El único que se atrevió a dar su veredicto fué Locho...y acertó. Para él le gustaría que fuera el 5 pero creía que era el 3. Y efectivamente el 3 (que quedó tercero con 16,37 puntos) era un Vega Sicilia ünico 1998.
El vino 4 que quedó segundo era López Cristobal Crianza 2005 de D.O. Ribera de Duero. ¿Y cúal era el vino 5 que ganó con 18,30 puntazos y que se encarama al primer puesto de nuestro ranking de vinos del 2009? Pues otro de la familia Vega Sicilia: Alión 2005 de D.O. Ribera de Duero. ¡Un vinazo!.
Tampoco estaba nada mal el Pintia que nos tomamos con las fabes de Iñigo. ¡Dios mio cómo estaban las condenadas! Tonino ha prometido hacer un comentario: lo esperamos. Y de postre el tiramisú que nos preparó Teresa. Magnífico final para lo que empezó muy bien. ¿Cúando repetimos? ¡Hasta el próximo jueves! que será el último antes de que nuestros ironmanes se vayan para Lanzarote a sufrir un pelín.

Notas de cata (puntuación de 0 a 20)
Alión 2005 - 18,30 puntos

Rojo picota oscuro, con ribete violáceo, vivo, brillante. Capa alta. En nariz un tanto cerrado al principio. Después aromas a fruta negra, especiados. Ataque alcohólico, ligeramente astringente, amplio, redondo, equilibrado.
López Cristobal Crianza 2005 - 17,56 puntos
Vivo, rojo violeta con capa medio alta y ribetes violáceos. Un color persuasivo y apetecible. En nariz es un vino con carácter, intenso, notas de violeta. Destacan también ahumados. En boca es largo, carnoso, tánico y especiado. Un vino con carácter, largo y persistente.
Vega Sicilia Único 1998 - 16,37 puntos
Rojo granate, luminoso. Nariz intensa, grosella, notas de madera "buena". En boca es amplio, largo, frutal. Equilibrado. destaca la nariz elegante.
Marqués de Borba reserva 2000 - 16,25 puntos
Rojo granate, con ribete granate. Un tanto apagado. Nariz intensa, compleja. Bayas de pimientas. En boca es amplio, sabroso, vigoroso, largo. Complejo en nariz, cambiante hacia profundos toques especiados. Gran acidez que revela larga vida.
Remelluri reserva 2002 - 15,60 puntos
Color rojo rubí con capa no muy alta. Algo cerrado al principio. después aparecen tostados, toques minerales sobre fruta roja madura. Buena intensidad. En boca buena sensación alcohólica. Fruta roja en sazón, pimienta negra, tostados. Algo de astringencia.