viernes, 17 de abril de 2009

Una amarga mirada al pasado (16 de abril de 2009)

Este jueves Tonino era el anfitrión de la cata. Nos iba a preparar en el Pandemonium una carne de corzo que había traido Iñigo, en recuerdo de su tío, gran cazador segoviano, Matías Miguel Rubio. Pero de ello hablaremos en los postres. Vayamos ahora a los vinos.

Nos había preparado Tonino cinco vinos blancos de los que sólo nos dijo que eran españoles. Según se iban sirviendo en copa alguna pista iba apareciendo. El color en todos ellos revelaba que no eran vinos jóvenes. El segundo vino incluso con irisaciones rosáceas, que desvelaban una evolución excesiva. Parece que estábamos catando vinos de añadas bastante antiguas. En aromas y boca se confirmaba dicha hipótesis.

El primer vino presentaba aromas que a Jose le recordaban a un sauvignon de Rueda, pero para Teresa era un vino gallego. Para Locho un vino del Rosal. A medida que se iban catando vinos veíamos más claro que se trataba de una vuelta al pasado de vinos gallegos y especialmente albariños. E incluso algún catador inspirado les puso nombre y apellidos. Locho identificó el Albariño de Fefiñanes y Davide Duo. Y Jose al Coto de Gomariz. Efectivamente, Tonino nos desveló que eran todos vinos gallegos del 2005, guardados en cava a 12º.
¡Que decepción! ¡Que mal han envejecido estos vinos! El ganador (Coto de Gomariz Colleita Seleccionada 2005) obtuvo menos de 14 puntos y sólo dos vinos superaron los 12 puntos. Me gustaron tan poco que no me apetece ni comentar uno a uno su cata, para no repetir los comentarios de aromas evolucionados, planos, desestructurados, etc. El que quiera más información que lea las notas de cata del final.

Menos mal que ahí estaba Tonino para ayudarnos a superar esta amarga mirada al pasado con una cena rica, rica, regada con Abadía Retuerta (no apunté la añada). Para limpiar boca nos trajo un arroz de centolla que estaba para chuparse los dedos.
Y llegó el momento del corzo sobre una cama de lombarda y pure de patata. Merecía la pena soportar los cinco vinos de la cata para poder llegar a la caza. Una armonía perfecta entre la lombarda y la carne.

Y de postre las apreciadas natillas con helado de chiquilín, para endulzar la noche.
Y ahora, con la boca endulzada y la perspectiva de las horas pasadas lanzo un reto: retomar la vuelta al pasado de vinos gallegos para desmentir las conclusiones de esta cata. ¿Quién se anima a organizar una cata con vinos gallegos de 2005 que nos permitan pensar que sí hay vinos que envejecen bien? ¿Hasta pronto!

Notas de cata (puntuación de 0 a 20 puntos)
Coto de Gomariz Colleita Seleccionada 2005 - 13,83 puntos
Amarillo dorado, brillante. Aromas de intensidad baja, cítricos y vegetales (hinojo). Amargoso, astringente. No es franco, acidulado y margoso. Mala evolución.
Abadía San Campio 2005 - 13,30 puntos
Amarillo dorado, apagado. Aromas de intensidad media, notas de miel y piel de naranja. Notas tropicales. Ligero, frutal.
Albariño Fefiñanes 2005 - 11,60 puntos
Dorado intenso. Aromas cítricos y a frutas tropicales (maracuyá). Graso y untuoso, con ligera acidez al final que le da un postgusto interesante. Toque alcohólico. Algo evolucionado que le ha hecho perder carácter y pierde intensidad al abrirse.
Colección Costeira 2005 - 11,16 puntos
Amarillo pajizo, brillante. Aromas de intensidad media, toques cítricos. Se le nota un compuesto azufrado. Poca estructura, corto, cítricos (pomelo) con un toque amargo. Aguantó mal el paso del tiempo, sin carácter, desequilibrado.
Davide Duo 2005 - 10,3 puntos
Amarillo dorado, brillante. Aromas de fruta madura, manzana golden, tarta de manzana. En boca le falta estructura, acidez descompensada. Cítricos, piel de limón. Falta de equilibrio.

viernes, 3 de abril de 2009

Duelo en Fefiñans (2 de abril de 2009)

Este jueves presenciamos en Ribeira de Fefiñans un duelo entre Jose y Locho. El arma: la syrah. Cada uno de ellos trajo tres vinos monovarietales de syrah. Locho los franceses (no podía ser de otro modo) y del Ródano, la patria de la syrah. Jose los del resto del mundo y para ello seleccionó un asutraliano, un sudafricano y un español. Y la peña haríamos de jurado. Para ello nos reforzamos con dos distribuidores de vino en California, Maggie y Dan, que demostraron ser unos magníficos catadores.

Para evitar toda posibilidad de identificación se virtieron en decantadores. Lucía (que no participó en la cata) numeró los decantadores y apuntó en un papel a qué vino corespondía cada número. Guardó celosamente el papel, tanto que a la hora de desvelar los vinos el papel no aparecía por ningún lado (al final lo encontró).
Empezó la cata y al principio la complejidad parecía enorme. Tras un primer repaso en nariz se notaba que estabamos catando syrah y parecía difícil identificar los vinos. Pero poco a poco el bosque nos dejó ver los arboles.

Los vinos 1 y 6 tenían los aromas más limpios a fruta roja, tal vez más complejo el 6. El vino 2 era el que menos gustaba, el menos franco y más plano. Del 3 se dijo muy poquito. Pasó bastante desapercibido. El vino 4 olía a mejillones en conserva, según Paula. No se si nos sugestionó o era así, pero a todos nos olía a mejillones. Posteriormente evolucionó a tabaco. A algunos les gustó, a otros menos y a alguno nada (Maggie se negó a probarlo después de olerlo). LLegamos a la conclusión de que era el Sudafricano. Efectivamente era Luddite Shiraz 2002
El vino 5 era francés, no nos cabía duda. Con aromas más de terroir que de fruta y con una boca más compleja que golosa, a Locho le encantó y otros no lo supimos entender. ¿Falta nuestra de sensibilidad o del francés de capacidad de expresión?. (Opiniones al buzón de comentarios, que ultimamente esta un poco soso). Efectivamente erá todo un Côte-Rôtie, Blonde de Seigneur 2002 de Domaine Georges Vernay, todo un clásico de las mejores laderas tostadas donde se cría la syrah. Quedó el tercero, detrás de los vinos 1 y 6. Para nosotros erán el español y el australiano, pues asignamos a Francia, además del consabido vino 5, el 2 y el 3.

No estábamos de acuerdo en cúal era el español y cúal el australiano. Para algunos el español era el vino 1 y para otros (entre ellos Jose y Maggie) el vino 6, que a la postre es el que ganó (con 17,30 puntos) seguido de cerca del 1 (17,08 puntos). Al final el vino 6 era un Tagonius 2005 Syrah de Vinos de Madrid. ¡Enhorabuena campeón! El vino 1 era Katnook Estate Coonawarra 2003 de Australia. Ganó Tagonius 2005 frente a otros cinco vinazos en cata ciega y no sólo es cuestión de que nuestro paladar aprecie más nuestros vinos. Para los amigos californianos tanbién fué Tagonius el vino más interesante de la noche.
Y ganó José. Locho: ¿qué te pagas?. Bueno, lo interesante fué también que en general fuimos capaces de identificar los vinos. Paradojas de la vida, somos capaces de identificar syrah de todo el mundo y nos columpiamos estrepitosamente con nuestros albariños (dejo el tema para no hacer sangre).
Bueno, como no pude quedarme al condumio espero que alguien me lo cuente en los comentarios. ¡Que paseis buena Semana Santa!

Notas de cata (puntuación de 0 a 20)
Tagonius Syrah 2005 - 17,33 puntos

Color rojo picota muy profundo con ribete granate. Capa alta. Nariz de intensidad alta, compleja. Frutos secos, nueces, almendra, tostados, café y un ligero fondo de fruta muy madura. En boca sorprende por so voluminosidad, se repite la nariz pero se intensifica la fruta. Voluminoso, equilibrado, goloso. Un vino muy equilibrado, goloso. Nariz y boca sorprendentemente agradable.
Katnook Estate Coonawarra 2003 - 17,08 puntos
Rojo rubí, con ribete algo granatoso. Capa media y no muy brillante. En nariz aparece fruta roja en sazón, regaliz negra, compota de ciruela, tostados finos, algo de brea. Paso elegante por boca, fruta negra (ciruela pasa). Excelente acidez. Mineral.
Blonde de Seigneur 2002 Domaine Georges vernay - 16,46 puntos
Rojo teja, apagado. Capa media. En nariz intenso, franco, muy varietal. Huele a uva. En boca sin aristas, amplio, sabroso, frutal, terroso. Vino redondo, equilibrado y varietal. Un gran vino.
Tardieu-Laurent 2006 Cornas - 15,50 puntos
Rojo picota. Aromas de intensidad alta, compleja, notas minerales y pimienta negra. En boca sin aristas, carnoso, ligeramente vegetal. Muy equilibrado.
Luddite Shiraz 2002 - 14,80 puntos
Rojo picota. Aromas de intensidad media-alta. Notas metálicas muy intensas. En boca resaltan las notas metálicas, pero es cálido con una nota punzante. Un vino complejo.
Renaissance 2005 Domaine Clape Cornas - 14,13 puntos
Capa baja, con tonos violáceos. Nariz media que pierde intensidad, algo sucio. Corto en boca. Demasiado plano, poco franco.