domingo, 7 de marzo de 2010

La cata que pudo ser y ... (4 de marzo de 2010)

Han pasado varias semanas sin catas (aunque no sin cenas y otros festejos varios) y nos volvemos a juntar pasados los carnavales. Y esta vez son Santiago y Rosa los que han preparado la cata. Eran seis tintos. Luego (después de descubiertos los vinos) sabríamos que eran vinos portugueses y que los habían buscado en tiendas del norte de Portugal, dejándose asesorar por las tiendas en la búsqueda de buenos tintos portugueses (de un nivel de precios entre 20 y 50 euros).

Cuando empezamos la cata teníamos poca información: que eran vinos europeos, que no los habíamos catado, que eran de distintas variedades.
Al meter la nariz en los vinos sospechamos que algo no iba bien. El primero presentaba unos olores a tierra mojada, a cuadra,...no invitaba a meterlo en la boca. Y los que a pesar de todo lo hicimos nos arrepentimos de haberlo hecho. El cuarto tenía corchazo. Decidimos por unanimidad excluir estos dos vinos de la cata pues probablemente son botellas que no son representativas.
¿Y los otros cuatro vinos? Pues no estaban mal, pero tampoco dieron la talla (al final las puntuaciones estuvieron entre 13,60 y 14,75). Se percibía en general una falta de franqueza y una mala evolución de los vinos. ¿En que condiciones habían estado unos vinos que en algún caso eran de 1995, 1998 y 1999? Sospechamos que en muy malas condiciones. Por ello los comentarios que hoy hagamos de los vinos deben tenerse muy poco en cuenta. Es probable que alguno de ellos tomado en otros circunstancias hubieran sido muy buenos vinos.

El vino que quedó en primera posición fué Chryseia 2007 Douro, con un ataque bastante láctico que poco a poco fue perdiendo.
En segundo lugar quedó Joaquim Madeira 2004, un vino del Alentejo. En tercer lugar quedó Quinta de Rouriz Reserva 2003, del Douro, y en cuarto lugar Herdade Grande 1999 del Alentejo.
Y como siempre me gustan los cuentos con final feliz, pues vamos a poner un final feliz a este cuento: ¡Y fuimos felices y comimos fabes con Vega Sicilia Único 1999! (Gentileza de Teresa e Iñigo).

Y de postre: torta de chicharrones (de la madre de Olga) y tiramisú (de Teresa). ¡Rico, rico! Hasta el próximo jueves.

Notas de cata (puntuación de 0 a 20)
Chryseia 2007 Douro - 14,75 puntos

Rojo granate, vivo. Intenso, con notas de fruta roja, láctico. Ligero, sin aristas. Vino equilibrado, ataque láctico inicial que se va abriendo.
Joaquim Madeira 2004 - 14,70 puntos
Rojo violeta, con ribete violáceo, capa alta. Carácter afrutado, frutos de baya, pimiente negra, balsámico, madera. Ataque amargoso, cálido, astringente. Evolución tánica, con final largo donde predominan los balsámicos.
Quinta de Rouriz 2003 - 14,30 puntos
Color rojo picota, brillante, presenta cierta sedimentación. En nariz presenta una intensidad media, tostados, almendras y ligeramente balsámico. Boca de entrada cálida y agradable, sabroso y postgusto con cierta madera.
Herdade grande 1999 - 13,60 puntos
Rojo teja, capa media-baja. Se nota cierta evolución, tierra mojada, frutam roja madura, especies (pimienta verde). Paso suave, algo picante a pimiento verde y otras especies, ciruelas rojas, tostados.

1 comentario:

Locho dijo...

Que los vinos no esten a la altura no exime a andie de su "obligado comentario" bajo amenaza multa en especie.

¿Terminará internet con el negocio de la vinoteca tradicional? (no incluyo a José por supuesto) sino al desaprensivo que espera a colocarle el muerto que tiene en el escaparate al primer incauto que le pida consejo. Gran ejemplo ha dado el Señor vinotecario de la Vasco de Gama de Valença.

Hoy nos toca ponernos las pilas de nuevo con Alberto.

Mi próxima cata está ya en camino, a pesar de internet todavía quedan vinos imposibles de encontrar.