viernes, 30 de abril de 2010

En busca de la Atlántida (29 de abril de 2010)

¡Ya están de vuelta de Lisboa nuestros medios ironmanes! Ayer eramos ocho catadores y la mitad habían participado en el Medio Ironman de Lisboa. ¡Dios mio, espero que no se pegue! Algunos estaban exultantes, otros lesionados (ya digo yo que tanto deporte no puede ser bueno). Pero bueno, ¿qué mejor cura que una buena cata?

Después del remojón en aguas atlánticas, Jose nos tenía preparada una cata de cinco vinos blancos de los que poco, o casi nada, nos dijo. Sólo que eran mayoritariamente monovarietales y que tenían un nexo común.
A la vista destaca los distintos amarillos de los vinos. En nariz también se percibe esa diferencia. El primero destaca por sus aromas afrutados, tiene una nariz bastante golosa. El segundo se muestra mucho más plano. El tercero también muestra fruta pero más tímidamente que el primero. El cuarto huele a frutos secos. A mí me recuerda al alvarinho de Anselmo Mendes, pero en pequeñito. El quinto es el más complicado, cambiante.
En boca se nota la acidez. El primer vino defrauda un poco en boca. Las expectativas que despierta la nariz se ven un poco truncadas en boca, quedándose pelín corto. El vino segundo es el más plano también en boca. El tercero está rico, pero sin mucho más. El cuarto sigue con sus frutos secos en boca, y despertando controversias. A unos gusta y a otros no. Y el quinto tenía la boca más completa de la noche, para mi gusto. Graso, amplio... pero a mis compañeros no gustó mucho.
¿Dónde estamos? Nos pregunta Jose. En general nos parecen vinos cercanos, nos resultan familiares. "Vinos atlánticos", dice Iñigo. Efectivamente, Jose ratifica que lo son. ¿Habrá traído vinos de Portugal? Alguno seguro que hay, pero otros nos parecen más cercanos. Seguro que hay varios vinos gallegos. Jose nos desvela las variedades: albariño, loureiro y godello, para los monovarietales y un vino portugués que es plurivarietal.

Surgen las apuestas y son tan diversas que todos acertamos algún vino. Las sorpresas vienen con el descubrimiento de las botellas. El vino segundo que quedó en último lugar (con 15,18 puntos) era el loureiro: L-100 DAVILA 2007 de Bodegas Valmiñor (D.O. Rias Baixas). En cuarta posición quedó el vino quinto (15,68 puntos) y era el vino portugués: Garrafeira 2007 de Quinta das Bagueiras (Región de Bairrada). Tercero (15,87 puntos) fue un godello: Avanthia Godello 2008 de D.O. Valdeorras. Las mayores sorpresas fueron los dos primeros vinos. El segundo vino, con 15,93 puntos y a sólo 15 centésimas del primero, era el cuarto vino (el de los frutos secos) y era un albariño 2006... de un paisano que conoce Jose. ¡Toca reflexionar sobre ese parecido entre este vino y el Anselmo Mendes (salvadas las distancias)! ¿Y el que ganó? Pues era el primer vino, nada menos que un As Sortes 2008 (D.O. Valdeorras). ¿Sólo hay una diferencia de 15 centésimas entre As Sortes y un vino de paisano? ¡A reflexionar!

Y para entonces ya había bastante apetito, así que nos pusimos manos a la obra con unas navajitas frescas, frescas y una caldeirada de pulpo rica, rica. Mojado con un vino de Lanzarote que nos trajeron Berta y Fran: malvasía seco de la bodega Stratus. Estaba francamente bueno y no digamos nada del malvasía dulce de la misma bodega que nos tomamos con los postres. ¡Un vicio! Y bastante mejor que tanto correr, leches, que os vais a pasar de rosca de ir tan deprisa, ironmanes. ¡Hasta el próximo jueves!
Notas de cata (puntuación de 0 a 20)
As Sortes 2008 - 16,12 puntos

Dorado brillante sin ser excesivamente intenso. En nariz elegante con fondo lácteo, fresco sin mucha intensidad. En boca fresco, ácido, largo, algo sabroso. No consigue impresionar. Correcto, equilibrado, elegante pero no destaca.
Albariño 2006 - 15,93 puntos
Amarillo pajizo, algo apagado. Primera impresión un fuerte aroma a cáscara de cacahuete. Tras pasar tiempo persisten aromas a frutos secos. Muy cambiante. Cálido, graso, largo. Elegante en boca, con cierta golosidad.
Avanthia Godello 2008 - 15,87 puntos
Amarillo pálido, casi transparente. Aroma afrutado con tonos cítricos a pomelo y limón, y vegetal. Amargoso en boca, ligero. Le falta carácter.
Garrafeira 2007 - 15,68 puntos
Amarillo pajizo con reflejos verdosas. En nariz intenso, a lima, monda de limón, mentolados, frutos secos, aromas de caucho. En boca amplio, graso, punzante. Cítricos, naranja amarga, toques tropicales, litchi.
L-100 Davila 2007 - 15,18 puntos
Amarillo dorado, brillante, luminoso. En nariz poca intensidad, floral y cítricos. En boca dulce pero amargo. Ligero pero untuoso. Quizá un poco contradictorio. Correcto.

4 comentarios:

Alberto dijo...

Chicos/as:
Parece que este formato de blog ya no da más de sí. Si no nos implicamos todos no tiene mucho sentido. Propongo darle entierro con la pausa de verano.

Unknown dijo...

Nooooooooooooo por favor, es cierto que no le estamos prestando mucha atención últimamante, pero creo que debemos seguir con el blog.
Este jueves tendremos la cata que nos tienen preparado los de Coalla, el grupo importador de vinos que nos comentó Locho. Veremos que sorpresas nos depara

Unknown dijo...

eh, que yo os leo!
Isi

Unknown dijo...

este jueves Locho y Rebeca nos tienen algo preparados, parece que es de blancos, y Alberto me parece que se la va aperder no?

Yo he estado este fin de semana en Porugal y he traído algunos vinos que parecen muy interesantes y que podremos probar en otra ocasión.