viernes, 5 de diciembre de 2008

La conjura de los dioses (4 de diciembre de 2008)

¡Tarde aciaga la de ayer! Parece que los dioses se confabularon para aguarnos la noche. ¡Y vaya si lo consiguieron!. Tras un día pasado por agua, tristón, nos preparamos nueve catadores para pasar una agradable velada en trono a seis vinos, "con alguna sorpresa" según el organizador. ¡Y vaya si había sorpresas!, probablemente muchas más de las que el mismo sería capaz de adivinar.
Estabamos ante seis vinos de importantes D.O. españolas (Rioja, Ribera de Duero, Priorato, Toro, Somontano y Valdeorras), de una supuesta alta calidad (alguno por encima de los 30 euros). Y empezamos a catar. Primero la nariz... ¿Nos pasa algo? ¿Estamos tontos, como el día? En las primeras impresiones coincidimos en que son un desastre. El vino 1 tiene un tufo tremendo, que luego se va pasando pero que vuelve... Con el dos discutimos que si es leche amarga, que si es otra cosa..., pero estamos de acuerdo en que son aromas desagradables. El tercero bastante evolucionado. El cuarto huele a medicamento. El quinto y sexto no son tan desagradables, pero sí muy poco expresivos. ¿Vaya noche nos espera!.
Y comienza la discusión..., pero no sobre vinos sino sobre la posible descalificación de dos de ellos. Al final dedicamos más tiempo a discutir sobre el concepto de descalificación que sobre los propios vinos. Acordamos descalificar el primer vino, por dudas sobre el estado de la botella catada. Era un vino de Toro..., hasta ahí es donde puedo llegar. Sobre el vino cuarto no llegamos a un acuerdo sobre su descalificación, por lo que siguió en cartel. Mas le hubiera valido salir de escena pues se llevó dos ceros (¿lado oscuro?) por primera vez en nuestras catas y sacó menos de 10 puntos, también por primera vez . Era en Priorato del 2000, tal vez ya pasado de fecha (Comte Pirenne)
El vino 2 suscitó un debate de la leche. Sí, discutimos sobre los lácteos que presentaba. Para algunos tremendos, para otros no eran lácteos. Pero en cualquier caso no gustó nada, mas bien disgustó. Y era, nada más y nada menos, que el deseado Pago de Carraovejas 2006 de Ribera de Duero. ¡Qué sorpresa!
El vino 3 presentaba una evolución escesiva. Respondía al patrón clásico de un Rioja Reserva pero ya pasado de rosca. Efectivamente era Rioja (Viña Lanciano Reserva 1998).
El vino 5 pasó sin pena ni gloria. Ni gustó, ni disgustó. Era el Valdeorras (Viñaredo 2005).
El vino 6 quedó el mejor, aunque a alguna catadora le molestó el carácter licoroso que presentaba. Ya sabeis que... en el reino de los ciegos el tuerto es el rey. (Absum Varietales 2006 de D.O. Somontano).
Pero la conjura de los dioses contra nuestra velada no acabó ahí. Con las tapas que nos preparó José, y para no correr riesgos, decidimos abrir dos botellas de Artadi Viñas de Gain 2004. ¡Pues una estaba bien pero la otra...tenía corchazo! ¡Vaya noche!
Lo mejor es irse a casa a dormir y mañana será otro día... ¡Pues a las cuatro de la mañana se pone a parir la Orejas! (una perra sabueso que apareció abandonada y recogí hace dos meses). ¡¡¡Vaya noche!!!

Notas de cata

Absum Varietales 06 - 14,05 puntos

Color rubí con ribete granate. Capa media-baja. Nariz de intensidad media-baja. Vino licoroso con fondo de madera y recuerdos de cacao y vaselina. En boca ligero, algo áspero pero sin astringencia. Un poco vacío. Recuerda a aroma de bagazo de aguardiente.

Viñaredo 2005 - 12,94 puntos

Color rojo rubí con capa media. Muy plano en nariz, toques de fruta negra, chocolate. En boca presenta fruta roja de pepita con algo de astringencia.

Viña Lanciano Reserva 1998 - 12,28 puntos

Rojo teja con ribete teja. Nariz de intensidad media, inexpresivo. Algo evolucionado. Ataque alcohólico, tánico, vigoroso y largo.

Pago de Carraovejas Crianza 2006 - 11,5 puntos

Color rubí, opaca. Ribete teja. Nariz totalmente láctica a mantequilla rancia.

Comte Pirenne 2000 - 9,55 puntos

Color purpura con ribete teja, apagado. Nariz de intensidad media, algo de frutos de baya y destacan sus balsámicos. Cierta vainilla. Ataque cálido con evolución carnosa que empeora con el paso del tiempo. Vino evolucionado que pierde con el tiempo. Algunos catadores consideraron que la botella estaba defectuosa.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno parece que lo mejor del dia de ayer es que alberto tiene más miembros en la familia. Enhorabuena Alberto!ya te mandaremos una caja de bombones, jaja.

Por cierto consulta la carta astral antes de decir que organizas tú la próxima cata... es un consejo.

Anónimo dijo...

Amigos de la cata, el lado oscuro está despertando, Loch ... quiero decir Lord Darth Vader se está haciendo cada día más fuerte, pero no desesperéis, ¡estad atentos!, y, que el Albariño nos acompañe.

Anónimo dijo...

Llevo todo el día planteándome si la sorpresa de ayer del Carrovejas fue satisfatoria o no y he llegado a la conclusión de que sí lo fue. Quedó patentemente demostrado que estamos ante un vino tremendamente sobrevalorado en el que juegan muchos factores que nada tienen que ver con la calidad del vino sino más bien con el marketing y las modas etc. pues al no tener el condicionamiento de saber el vino que estas bebiendo la valoración es mucho más diáfana y pone las cosas más claramente en su sitio. Como hostelero, y los que lo sois convendreis conmigo, he tenido que sufrir en varias ocasiones el "chantaje" de los distribuídores de este vino, cuando te lo ofrecían con la condición obligatoria de tener que comprar otros para tener derecho a una segunda caja con el pretexto de la fortísima demanda que el vino en cuestión tenía, o de que algún cliente del restaurante que te lo pedía y al decirle que se había agotado te insinuaba que eras un "pringado" por solo tener derecho a una caja. En fin, lo mejor de la cata de ayer fue la demostración de que estamos ante un vino bastante mediocre cuyo precio esta muy por encima de la calidad del mismo y que viene a dejar patente lo que muchos ya llevamos tiempo diciendo y es que es un vino que esta por debajo de otros muchos de su mismo precio que por supuesto se venden muchísimo menos.

Saludos.
Tonino.